Reserva del lugar perfecto 

Para elegir el lugar correcto donde casarse hay que tener en cuenta que los acontecimientos más importantes son tres: la ceremonia, el banquete y la vivienda para los novios y los invitados si la boda non es en su propia ciudad. Estas tres situaciones pueden coincidir en  el mismo lugar o no.

Si es un matrimonio católico, la ceremonia será dentro de una iglesia consagrada. En algunos casos hay la ocasión de tener una capilla privada directamente en el alojamiento.

En el caso de un matrimonio civil, muchos municipios  ofrecen lugares  de valor  histórico o artístico  particular como casas comunales es decir  opciones alternativas a la oficina central, que a menudo es un lugar despersonalizado o demasiado lleno de gente no atinente a la boda.

Póngase en contacto con nosotros libremente si desea más información de situaciones específicas.

Si usted tiene 20 o más huéspedes puede ser interesante alquilar una villa o casa de campo para el uso exclusivo. En este caso, tanto la ceremonia simbólica  como el rito protestante con reconocimiento civil pueden hacerse en cualquier punto sugerente de la propiedad privada.

A la hora de realizar un alquiler exclusivo de una propiedad hay dos opciones: puede ser diario si  no es posible quedarse a pasar la noche, o  por períodos  tantos cortos como duraderos.

El corto plazo implica un mínimo de tres días de residencia con la posibilidad de realizar la ceremonia y la recepción; durante largos períodos en cambio el mínimo requerido es de una semana.

En el caso de que la villa  no tenga una capacidad suficiente para dar cabida a todos los invitados   se puede organizar con las estructuras adyacentes para alojar cómodamente a todos los demás huéspedes.

Es importante comprobar de antemano la disponibilidad tanto de la iglesia, como de las estructuras y cuente conmigo para apagar todas las curiosidades acerca de las características de las residencias y  de las posibles soluciones para la disposición de los diversos momentos del evento.